El pasado domingo 29 de septiembre corrí por primera vez en mi pueblo, Laguna de Duero, que siempre lo será aunque ya no viva allí y estuve muy concentrado con la intención de no hacer demasiado el ridículo ante mis paisanos. El día anterior me lo había tomado muy en serio, y a pesar de tener cena, me fui pronto a dormir con el propósito de descansar lo más posible.
Llegué sobre las 10:10 a los alrededores del polideportivo, donde ya estaba Dani, compañero de SoloRunners, si bien no apareció nuestra querida Cruz, que ya no la creo cuando dice que me acompaña a una carrera (menos mal que no la dije que sí cuando me propuso la media de valladolid). Isaías llegaría algo más tarde, pues ya habían recogido por él su dorsal el día anterior.
Salí con Dani a calentar una vuelta al circuito de casi 2500m al que deberíamos dar cuatro vueltas en la carrera y desde ese momento fue una concentración altísima y unas sensaciones la mar de buenas.
Con las mismas se dio salida a la carrera y no sé si por la motivación extra o por la concentración me daban ganas de salir a más no poder. Pero ahí estaba mi liebre de siempre marcando el ritmo adecuado y aunque me apetecía tirar más supe que debía estar cerca de eĺ para no desvanecer al final. Así pasaron las dos primeras vueltas, aprox en 26'.
La tercera fue la peor, me descolgué un poco pero no demasiado, y aunque un ritmo algo inferior conseguí no desvanecerme por completo. Mantenía la distancia visual con el grupo antecesor y así llegamos a la última vuelta, donde pude apretar un poco, pero sólo un poco. Fui calculando para conseguir llegar por debajo de 55' y cuando di la última curva, viendo que el reloj acababa de marcar 53 sabía que lo lograba. Al final 53:59, bonita carrera y objetivo cumplido.
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